El color azul es el color preferido por los occidentales. El color azul trae a nuestra mente el cielo y el mar e inspira pureza y frescor, siendo ideal para favorecer el descanso y la imaginación. Por estas y otras razones, incluir en nuestras habitaciones el color azul (sobre todo en dormitorios) es aconsejable si se pretende crear espacios de paz y relax.La clave está en elegir bien los tonos, para que no sean en su mayoría demasiado intensos y exista un equilibrio en el conjunto. En este dormitorio que os enseñamos a continuación esa armonía entre azules se ha conseguido perfectamente, creando así un lugar perfecto para el descanso.
Es recomendable el azul claro para pintar las paredes de habitaciones pequeñas ya que dará una sensación de amplitud que otros colores no consiguen y otorgará a la vista la ilusión de mayor espacio. Nunca elijas un azul oscuro para estancias de pocos metros ya que dará sensación de frialdad incompatible con el descanso.
Si no quieres correr riesgo a la hora de decorar con color azul, la combinación de blanco y azul es una apuesta segura. Si te decides por tener una habitación con tonos azules, los muebles blancos le irán de maravilla o al contrario, si las paredes son blancas un toque azul en los elementos decorativos es lo ideal.
Fotos| Martha Stewart